Como sea que lo llamemos, conozcamos o donde sea que hayamos nacido, todos aprendemos la palabra “sol”. Todos aprendemos en la escuela sobre este círculo amarillo tan importante que es el centro del sistema solar, y en muchas partes del mundo, muchas comunidades festejan su existencia todos los beneficios que otorga a nuestra salud, mas allá de la luminosidad. (Blanco, 2018)
Cada 21 de junio, coincidiendo con el solsticio de verano (hemisferio norte), el día más largo del año, las organizaciones ecologistas celebran el Día Internacional del Sol con el objetivo de promocionar y apoyar las fuentes de energía renovable. Sus beneficios no solo se vinculan al equilibrio planetario o a nuestro equilibrio físico; sino que también influye en nuestra salud y puede movernos espiritual y emocionalmente (Planeta Vivo, 2018). La energía que proporciona el sol es tan grande, renovable y útil que en países como Alemania es la principal fuente energética, además de ser barata y ahorrar a sus habitantes gastos en electricidad o gas natural. El uso de este tipo de energía a la vez representa una reducción en el impacto ambiental que el planeta ha venido sufriendo durante estos años y ha aumentado en la última década.
Mejora nuestra salud
A continuación detallamos 10 de los muchos beneficios que el ‘astro rey’ tiene para nuestra salud:
- Propiedades terapéuticas en algunas enfermedades dermatológicas por su efecto antinflamatorio
- Promotor de la epitelización y la circulación
- Psoriasis: la exposición al sol por un periodo muy corto de tiempo, 10 minutos basta, promueve la cicatrización de las lesiones. Lo mismo sucede en algunas dermatitis
- Ayuda al organismo para la generación de vitamina D. La piel al recibir las radiaciones ultravioletas genera vitamina D, esta será metabolizada en los riñones para transformase en su forma activa y de esta manera contribuir con la absorción y deposito de calcio en los huesos (Navarra, 2018). Además vitamina D es fundamental para la mineralización de los huesos y de los dientes.
- Ayuda a prevenir y controlar el acné
- Más defensas para nuestro cuerpo ya que aumenta el número de glóbulos blancos en sus dos líneas, neutrófilos y linfocitos
- Metaboliza el colesterol. Nos ayuda ar rebajarlo
- Presión arterial: al dilatarse las arterias disminuye la cantidad de sangre concentrada en los órganos. Esto baja la presión arterial, lo que es ideal para los hipertensos
- Los rayos ultravioleta regulan la producción de melatonina, hormona que ayuda a definir los ciclos de sueño. La luz solar reduce sus niveles, lo que ayuda a sentirse más despierto.
- Beneficio para nuestro estado de ánimo ya que promueve la síntesis de la serotonina, una sustancia relacionada con el bienestar
Y perjuicios…
Pero, no todo es color de rosa; porque, así como nos brinda calor, abrigo y como hemos visto varios beneficios para la salud, la exposición constante e indiscriminada al sol también puede ser causante de enfermedades y lesiones principalmente dermatológicas, empezando desde una irritación leve de la piel, un envejecimiento prematuro debido a destrucción del colágeno y generando un mayor riesgo de tumores cutáneos en especial los melanomas.
Sin embargo, existen medida bastante buenas y obvias que podemos tomar para evitar las temibles consecuencias de la exposición al sol. Para los padres en especial, es crear un buen habito de exposición, es decir, los niños están desarrollando un hábito con respecto a la exposición al sol por lo que limitarla es una buena manera de cuidarlos, además instruir a los adolescentes a evitar el uso de camas de bronceado. Evitar la exposición directa a los rayos solares es la mejor y más fácil manera de evitar el desarrollo de una enfermedad cutánea ya sea tumores benignos o malignos de la piel.
Por último, pero no menos importante, el uso de protector solar es fundamental en cuanto al cuidado de la piel, pero no basta con colocarse una vez al día ya que la composición de estos se ve afectada por varios factores como el tiempo, la transpiración, el agua, etc. Es por esto por lo que el uso de protector solar debe ser cada 3-4 horas durante el día y teniendo en cuenta que las horas (10 y 4 de la tarde) en que el sol se encuentra en su punto máximo y las radiaciones son mayores su uso deberá ser más frecuente.
Finalmente, para no restarle importancia a este día internacional del sol y para perder el miedo a exponernos el solo debemos recordad que todo es malo si es en exceso. El astro rey nos proporciona miles de beneficios y por eso estamos agradecidos. Así que, en esta ocasión, yo me siento agradecida de poder disfrutar un día más de sol.
Autora: Katherine Yépez A, AEMPPI UDLA, Vicepresidenta de Capacitaciones y Eventos Nacional 2018, Miembro de AEMPPI Ecuador