Las anémonas marinas o actiniarias son un tipo de animal invertebrado que permanece la mayor parte de su vida anclado al sustrato y que tiene se alimenta de una dieta carnívora. Puesto que no puede moverse, la única manera de cazar algún animal es esperando a que pase lo suficientemente cerca como para alcanzarlo con sus tentáculos.
Existen más de 1.000 especies diferentes descritas y pueden llegar a medir casi dos metros de alto. Están adheridas al suelo marino mediante un pie, su cuerpo tiene forma cilíndrica y en el centro se halla la boca, a donde se hace llegar la comida mediante los tentáculos. Estos se ponen en activo cuando notan cualquier pequeño roce y se lanzan sobre la presa y le inoculan un líquido paralizante.
Suelen vivir cerca de la costa en todo tipo de aguas, con temperaturas templadas o frías. Son un tipo de animal que establece simbiosis con otros como por ejemplo algunas algas, a las que protege de la exposición a la luz solar, o el pez payaso, que tiene una fina capa de mucosa alrededor de su cuerpo que lo protege del veneno de las anémonas.
FUENTE: National Geographics