Estuvimos hablando con el cantante Juanes, amante de los animales y la naturaleza nos dejó una maravillosa reflexión, esperamos que les guste tanto como a nosotros.
Hace unos años tuvo una crisis personal, tuvo que parar y reencontrarse en el silencio. Ahora, con la situación del COVID-19, hay un parón obligado ¿cómo lo está llevando? ¿hay algún aprendizaje personal que quiera compartir?
Imagino que lo estoy llevando igual que todos, pasando de un estado a otro. En algún momento descansando y aprovechando el tiempo para componer canciones, pasar tiempo en familia, o en otros simplemente para llenarme de incertidumbre frente al futuro. Es imposible no angustiarme, por ejemplo, si pienso en mi madre que tiene 90 años de edad y que se encuentra en Medellín. Todo es realmente extraño y nuevo aunque en el fondo una gran oportunidad para reinventarnos a todos los niveles.
¿Qué canción le provoca más cantar estos días?
Realmente me he puesto más en la tarea de componer, aunque si, en la noche me provoca cantar. Lo hago con canciones clásicas que siempre he amado, quizá un tango de Gardel, un vallenato de Diomedes Díaz o alguna mía como Más Futuro que Pasado.
Cuando está triste, ¿qué hace para levantar el ánimo?
Sufro de depresión desde la adolescencia, nunca ha sido fácil luchar contra esto, definitivamente el deporte me ayuda mucho y por supuesto la música. Hago una hora de ejercicio diariamente en la mañana, cosa que me sube el animo bastante, ya después voy al estudio y ahí todo se vuelve canción, la alegría o la tristeza.
“Los árboles están llorando, son testigos de tantos años de violencia. El mar está marrón, mezcla de sangre con la tierra” ¿Cambiaría, quitaría o añadiría algo hoy de “Minas Piedras”?
Quisiera poder cambiar todas las palabras, pero lamentablemente no se puede, pues sigue siendo una realidad. Estamos acabando con nuestro planeta y de qué manera, la desigualdad social y económica siguen siendo titulares.
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Después de conocer de cerca las consecuencias del conflicto armado, y en particular de las minas antipersona, creó en 2006 la fundación Mi Sangre , una organización que aboga por la construcción de una cultura de paz en Colombia, “que respeta la vida en todas sus formas y que promueve el amor, la equidad, la libertad, la diversidad, la ciudadanía y la responsabilidad compartida.” Su fundación es muy necesaria, ¡tendría que ser mundial! ¿No se lo ha planteado?
Amamos lo que hace la fundación y creemos seriamente en el poder del arte como herramienta de transformación. Soñamos con crecer, pero nuestros recursos son limitados y los retos a los que nos enfrentamos diariamente inmensos, así que vamos creciendo orgánica y naturalmente. En 13 años el avance ha sido maravilloso y los resultados contundentes.
Siempre ha convivido con perros, ahora con Pluto y Parce ¿puede describir cómo es su relación con ellos? ¿qué es lo que le atrae de los animales?
Amo los animales con toda mi alma, me acompañan en la casa y le han servido incluso a mis hijos y esposa como terapia amorosa, a veces siento que solo les falta hablar..jeje . Siento que la humanidad será vegetariana de aquí a 100 años, si algo extraordinario no ocurre antes.
Y la naturaleza ¿qué significa para usted?
La naturaleza es todo para mi, es Dios, la vida, la muerte, la fuente de energía, la armonía, todo es la naturaleza y la naturaleza es todo, el principio y el fin.
¿Qué es lo que más le gusta de la vida?
Respirar la vida, sentirme vivo, amar a mis hijos como a nada he amado, poder hacer música y cantar, poder razonar, pensar y reflexionar.
¿Y qué es lo que más enfado le provoca?
Me enfada la mentira y la corrupción, personas en lugares de privilegio abusando de personas indefensas, algunas veces en nombre de la justicia, otras en nombre de Dios, en lugar de estar aportando al bienestar común.
En una ocasión usted dijo “todo está por construirse, cada día que comienza es una oportunidad para hacer algo maravilloso”. ¿Cual cree que es su contribución más valiosa?
Mi contribución es mi obra musical, lo que podrá quedar cundo me vaya, mis canciones, nada mas.
¿Qué le pediría hoy a Dios?
Mi concepto de Dios ha ido transformándose con el tiempo pero mis deseos siempre serán los mismos, el bienestar de mis queridos y el mundo.
Para finalizar, ¿hay algo que quisiera añadir? ¿algún mensaje o llamamiento?
El mundo está cambiando a pasos agigantados, nuestro reto como seres humanos es estar a la altura del momento y tomar buenas decisiones a todos los niveles. Este es el momento para que brille nuestra conciencia.
Una entrevista de María Talavera